La empresa de seguridad G Data ha advertido de un nuevo ataque de phishing que se está desarrollando en Facebook y que tiene como objetivo robar los datos personales de los usuarios.
El mensaje llega al usuario al conectarse en la red social como si fuese un mensaje enviado por el servicio oficial de seguridad de Facebook: Facebook Security.
Sin embargo, si se mira bien el mensaje, puede verse que el destinatario es «Facebooĸ Securiƚy», donde la ‘k’ y la ‘t’ no están escritas con el estilo de letra habitual. Eso sí, cuesta verlo y muchos caerán sin darse cuenta en las redes de estos cibercriminales.
En el mensaje, una vez abierto, se conduce al usuario a una página como la que muestra la segunda imagen bajo este texto. En ella se le pide que introduzca su nombre, dirección de correo, contraseña y fecha de nacimiento para evitar que su cuenta de usuario sea desactivada.
Para evitar dar los datos personales, en este caso sobre todo se apela a la precaución. Hay que prestar especial atención al remitente de este tipo de mensajes. Según la empresa de seguridad, es una práctica habitual de los ciberdelincuentes el modificar algunos caracteres o sustituirlos por otros muy parecidos para conseguir una apariencia lo más posible a la original.
El mensaje llega al usuario al conectarse en la red social como si fuese un mensaje enviado por el servicio oficial de seguridad de Facebook: Facebook Security.
Sin embargo, si se mira bien el mensaje, puede verse que el destinatario es «Facebooĸ Securiƚy», donde la ‘k’ y la ‘t’ no están escritas con el estilo de letra habitual. Eso sí, cuesta verlo y muchos caerán sin darse cuenta en las redes de estos cibercriminales.
En el mensaje, una vez abierto, se conduce al usuario a una página como la que muestra la segunda imagen bajo este texto. En ella se le pide que introduzca su nombre, dirección de correo, contraseña y fecha de nacimiento para evitar que su cuenta de usuario sea desactivada.
Para evitar dar los datos personales, en este caso sobre todo se apela a la precaución. Hay que prestar especial atención al remitente de este tipo de mensajes. Según la empresa de seguridad, es una práctica habitual de los ciberdelincuentes el modificar algunos caracteres o sustituirlos por otros muy parecidos para conseguir una apariencia lo más posible a la original.